Esta calle cuenta con la singularidad, además, de estar construida sobre el trazado de la Vía Augusta, la principal calzada romana que cruzaba Hispania de norte a sur. El tramo que recorrió San Vicente desde Zaragoza hasta Valencia para recibir martirio se ha convertido en una ruta de peregrinación jalonada por columnas de piedra que imitan a los antiguos miliarios romanos. Una de estas columnas podemos encontrarla en la entrada del Monasterio de la Roqueta.
está construida sobre el trazado de la Vía Augusta