sábado, 29 de agosto de 2015

DE EXCURSIÓN POR LA ESPAÑA ROMANA

 Te proponemos realizar un viaje al pasado: solo tienes que hacer clic en los iconos del mapa para acceder a las rutas por las antiguas ciudades del Imperio romano.

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y si quieres ver los monumentos que hay en Valencia
Museo de Historia de Valencia / Centro Arqueológico La AlmoinaEl Museo de historia de Valencia (MhV) nos invita a descubrir el pasado de la ciudad desde dentro a través de datos cotidianos. Su exposición permanente se divide en ocho periodos históricos que inician el recorrido desde su fundación en época romana hasta la actualidad. La narración de cada uno de ellos se realiza a través de los fondos arqueológicos, artísticos y culturales municipales.
Por otro lado, el solar de la La Almoina, situado junto a la Catedral, es un gran espacio subterráneo en el que se puede contemplar la parte más monumental de la ciudad romana, visigoda y árabe. Constituye una verdadera antología histórica y urbana de lo que ha sido la ciudad de Valencia. En La Almoina se contemplan edificios que remontan a la fundación de la ciudad como el santuario de Asclepios, un horreum y unas termas.
Centro Arqueológico La Almoina. Foto: Felipe Araya Allende CC-BY-SA
Centro Arqueológico La Almoina. Foto: Felipe Araya Allende CC-BY-SA
Teatro Romano de Sagunto (Museo Histórico Sagunto)Edificado alrededor del año 50 d.C. en una ladera de la ciudad de Sagunto, es el único teatro de los once que se conocen hoy en España que preservaba suficientes elementos constructivos a la vista desde la antigüedad. Con más de 90 metros de diámetro tenía un aforo de 8.000 personas aproximadamente. Su estructura es la clásica scaenae, cávea y orchestra y cuenta aún hoy con una acústica excelente. En 1896 fue el declarado Monumento Nacional en España y actualmente está en uso.
Teatro Romano de Sagunto (Museo Histórico Sagunto). Foto: Antonio Marín Segovia. CC-BY-NC-ND
Teatro Romano de Sagunto (Museo Histórico Sagunto). Foto: Antonio Marín Segovia. CC-BY-NC-ND
El museo Histórico de Sagunto (MUHSAG) acoge las colecciones procedentes de la ciudad de Sagunto. Desde 1952 se encuentra adosado al Teatro Romano y alberga una importante colección de piezas de la época ibero-romana: destacan piezas de cerámica ibérica y la escultura en piedra del “Toro Ibérico”. De época romana hay que destacar las colecciones de cerámica y epigrafía que alberga el museo.
Sagunto (Domus dels Peixos, Vía del Pórtico y Templo de Diana)Pero la historia romana de Sagunto no se limita al teatro. La Domus dels Peixos fue una vivienda de época alto imperial descubierta en 2002 bajo el antiguo cine Marvi y que actualmente puede visitarse. La musealización muestra el impluvium de la casa, en perfecto estado de conservación con pinturas murales de peces y motivos marinos; un tablinium o despacho del propietario de la vivienda; una tabernae (tienda) y un balneo o baño privado.
Por su parte, la Vía del Pórtico, en la plaza de la Morería, es un tramo de 60 metros de una calzada romana en muy buen estado de conservación, con pórticos a ambos lados y cloaca central. Por último, detrás de la Iglesia de Santa Maria se encuentran los restos de uno de los muros del Templo de Diana.
Sagunto (Domus dels Peixos, Vía del Pórtico y Templo de Diana). Foto: Simon. CC-BY-NC-ND
Sagunto (Domus dels Peixos, Vía del Pórtico y Templo de Diana). Foto: Simon. CC-BY-NC-ND
Acueducto Els Arcs (Manises)Está ubicado en el barranco del Salt de l’Aigua, en el término municipal de Manises. Se construyó con el objetivo de superar el Barranco Salt de L’Aigua y poder llevar el agua procedente de la acequia de Quart a las poblaciones vecinas. Tiene un total de 28 arcos de diferentes tipologías, dispuestos entre grandes pilares. Encima se ha vuelto a construir de nuevo la acequia que conduce el agua, de obra de hormigón.

POMPEYA DOCUMENTAL

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 y podrás hacer una visita virtual a la ciudad romana.


lunes, 10 de agosto de 2015

LA EDUCACIÓN EN ROMA


imperio romano

Gran parte de los niños romanos fueron a las escuelas (hasta los doce años); las escuelas eran mixtas. A los doce años los niños se separaban, y solo los varones de las familias adineradas proseguían los estudios, bajo la tutela de un gramático: autores clásicos y estudio de la mitología; las niñas entre los 12 y 14 años eran consideradas en edad núbil: podían ser ya prometidas a varones de otras familias, y a los 14 eran ya consideradas como señoras (domina, kyria), a esa edad se casaban, y desde entonces se dedicaban solo a embellecerse o a trabajar en la rueca, las aristócratas claro. Su futura educación dependería del marido, quien decidía acerca del desarrollo de su saber.

Los estudios del varón no se hacían con fines utilitarios sino más bien por la apariencia (prestigio) enfocándola más que todo en la retórica. En las zonas griegas del imperio la educación era diferente, ya que conservó su ancestral sistema de enseñanza: primero porque era pública, se hacía en gimnasios abiertos para todo el mundo; segundo porque el enfoque estaba puesto tenazmente en el deporte, que ocupaba más de la mitad del tiempo de los chicos; y finalmente porque la educación griega se prolongaba hasta los 16 o incluso los 18 años de edad, en que el joven era todavía considerado como un efebo. La historia, filosofía y literatura se enseñaban en los rincones mismos de los gimnasios. Aún hay una cuarta diferencia: todos los preceptores romanos (que frecuentemente eran griegos) enseñaban griego a sus pupilos, pues era la lengua de la cultura y de las ciencias, mientras que en Grecia ignoraban el latín y no lo tomaban muy en serio, ignoraban incluso a Cicerón o a Virgilio; solamente después de largo tiempo, a finales de la antigüedad, aprenderían estos latín, “para llevar a cabo una carrera jurídica en la administración imperial”.



Terminada la educación el joven romano aristócrata tenía dos caminos: el ejército o la administración pública; los más pudientes optaban por la segunda vía, siendo frecuente ver a chicos de 16 o 18 años ocupando el cargo de oficiales o sacerdotes del estado o de oradores del foro. Como dijimos, la retórica era muy apreciada: un buen orador tenía siempre más popularidad o fama que cualquier poeta (la oralidad era más tomada en cuenta que la escritura). Pero la retórica siempre se ocupó de temas fáciles que atañían sobretodo a las relaciones sociales mucho más que a la naturaleza o la psique (temas preferidos por los griegos). Por otra parte, no había mayoría de edad legal; simplemente el padre decidía cuando cambiar de ropas (ponerle la toga) y afeitar a su hijo, tratándolos o de púberes o de impúberes

domingo, 9 de agosto de 2015

EL EJÉRCITO ROMANO


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